miércoles, 10 de febrero de 2016

Pobre patria mía: Porfirio Díaz.

En la novela, narra sus últimos años de vida de Porfirio Díaz, así como memorias de su niñez y de sus maldades.

La política de Díaz era de modernizar a México, a costa de mantener a la mayoría en la pobreza, mantenía relaciones con muchos líderes del mundo y también con personajes científicos.
Díaz se enteraba a través de cartas,  visitas de sus familiares y amigos de todo  lo que pasaba en el país acerca  del asesinato de Madero. La novela dice que entonces que uno de los asesinos  del Presidente Mártir y del vicepresidente Pino Suárez fue su yerno Ignacio de la Torre y Mier.
Porfirio Díaz murió añorando Oaxaca ya que fue el lugar donde nació,  el barrio de la Soledad, durante su niñez menciona que fue  huérfano de padre y siempre recordaba a su madre.
Participo en  el Seminario y su aprendizaje de los liberales del Instituto de Artes y Ciencias del Estado.
Durante toda su infancia Díaz en el Zócalo de Oaxaca, fue un bolero betunero, aseador de calzado hacía la limpieza de zapatos era el trabajo que el tenia.
Al morir y trasladar los restos de Porfirio Díaz al estado de Oaxaca se decía que tenía el derecho de estar ahí porque ahí había nacido y a ahí lo tuvieron que entregar a un que tuvieron varios conflictos al dejar los restos

Al igual que mencionaba la novela que el 25 de mayo de 2011 se cumplieron  los 100 años de la renuncia de Porfirio Díaz a la Presidencia de México, terminando su larga dictadura. Persisten el analfabetismo ya disminuido, la insalubridad y la pobreza en muchas familias mexicanas.  En su gobierno de  sus últimos sexenios  modernidad que ha servido a unos cuantos y mantiene en la pobreza a la inmensa mayoría  de vida de los mexicanos ha profundizado la enorme desigualdad en el país.                                                                                               El título a un es  vigente, como hace un siglo: Pobre patria mía.